Esta intervención se encuentra ubicada en las plantas altas de la Torre Auditori, en el Paseo de la Zona Franca de Barcelona. Las vistas privilegiadas proporcionadas por su altura han sido una premisa que debe mantenerse en el diseño de estos espacios de oficinas.
Las plantas se proyectan totalmente diáfanas, sólo realizando cerramientos de pared alrededor del núcleo central para servicios como racks, almacenes y zonas de reprografía. El resto de divisorias y cierres están hechos con vidrio, lo que permite no perder nunca las visuales hacia el exterior, así como proporcionar luz natural al interior.
El blanco de los muebles y el gris del suelo y techos sólo se ven rotos por los elementos vegetales que aparecen en los recorridos de las oficinas, así como en la zona de la cantina, más informal y coloreada.
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